Estructuras narrativas para organizar tu obra

Cómo elegir la mejor estructura para que tu obra fluya de forma coherente

Elegir la estructura narrativa adecuada es clave para que tu obra fluya de forma coherente y mantenga el interés de los lectores. Existen diversas estructuras que pueden ser consideradas, cada una de ellas con sus ventajas y desventajas, dependiendo del tipo de historia y libro que quieras crear. A continuación exploramos las más utilizadas:

Estructura lineal

La estructura lineal es un clásico en la literatura, consiste en un orden cronológico el que los eventos se desarrollan de principio a fin sin interrupciones. Este tipo de estructura guía al lector por una serie progresiva de sucesos, lo que genera una sensación de orden y facilita la comprensión. Se destaca por ser una forma sencilla de narrar las obras, y es ideal para novelas y relatos que tienen un arco argumental muy claro y definido.

Ejemplo breve e ilustrativo:

«Ana se despertó temprano, fue al trabajo y, al terminar, se reunió con sus amigos para celebrar su cumpleaños. Esa noche, antes de dormir, pensó en lo feliz que se sentía.»

➢ Ventajas: es una estructura clara y fácil de seguir.
➢ Desventajas: en ocasiones puede ser predecible o aburrida si no se mantiene un ritmo adecuado de narración.

¿Cuándo usarla? Si tu historia tiene un inicio, desarrollo, conflicto y desenlace bien definidos y querés que el lector avance de forma fluida, esta es una estructura ideal para lograr ese objetivo.

Estructura en plena acción

Este tipo de estructura es más conocida como “in media res”, consiste en comenzar la historia en un punto intermedio o en medio de la acción, y luego retrocede para contar los eventos previos. Es un estilo muy útil para captar la atención del lector y generar intriga desde el principio del libro.

Ejemplo breve e ilustrativo:

«El auto estaba a punto de caer por el precipicio. Raúl no sabía si sería su último segundo de vida. ¿Cómo había llegado hasta aquí? Todo comenzó un mes atrás, cuando decidió tomar el trabajo…»

➢ Ventajas: Crea tensión y expectativa desde el principio, mantiene al lector intrigado.
➢ Desventajas: Puede ser confuso si no se maneja bien el retroceso en el tiempo.

¿Cuándo usarla? Si tu historia tiene un punto final fuerte que servirá para captar la atención del lector, empezar en ese momento y luego retroceder puede ser muy efectivo e incluso en algunos casos un recurso innovador.

Estructura circular

En esta estructura, la historia termina donde comienza, creando así un ciclo que da sensación de cierre o conclusión. Es común en relatos que exploran temas como ciclo de vida, destino o evolución personal.

Ejemplo breve e ilustrativo:
«Marta observaba la puerta cerrada. Recordaba la primera vez que la cruzó, llena de sueños. Ahora, veinte años después, volvía al mismo lugar, con la misma maleta, pero una nueva mirada sobre la vida.»

➢ Ventajas: Proporciona una sensación de cierre y da lugar a la reflexión.
➢ Desventajas: Puede parecer repetitivo si no se introduce un cambio significativo o un crecimiento en el personaje o en la trama.

¿Cuándo usarla? Si el tema de tu historia está relacionado con ciclos o crecimiento personal, esta estructura puede reforzar tu mensaje.

Estructura fragmentada

Esta estructura presenta eventos en un orden no cronológico, saltando entre distintos momentos de la historia, presenta distintos sucesos a través del tiempo, y hace un viaje constante entre el pasado y el presente. Este estilo es común en novelas modernas y posmodernas, donde la temporalidad se rompe para explorar temas complejos o memorias pasadas.

Ejemplo breve e ilustrativo:

«Era un día lluvioso cuando Ana lo conoció. [Salto al pasado] Cinco años antes, ella había decidido dejar su ciudad. [Vuelta al presente] Ana miró el reloj y supo que su vida cambiaría en ese momento.»

➢ Ventajas: Ideal para explorar temas psicológicos, recuerdos o memorias.
➢ Desventajas: puede ser difícil de seguir el hilo de conductor si no está bien aplicado el recurso.

¿Cuándo usarlo? Si tu historia trata sobre recuerdos, temas, traumas o percepciones del pasado que afectan a la trama del presente, esta estructura puede agregar profundidad y complejidad.

Estructura de historias paralelas

Las historias paralelas presentan dos o más tramas que se desarrollan simultáneamente y que, eventualmente, se conectan entre sí de alguna forma. Este tipo de estructura es ideal para mostrar diferentes perspectivas o para explorar cómo distintos eventos se encuentran en un ismo punto.

Ejemplo breve e ilustrativo:

«En Buenos Aires, Laura esperaba la llamada que cambiaría su carrera. Mientras tanto, en Londres, David leía un correo que lo haría tomar una decisión inesperada. Ambos desconocían cómo sus vidas estaban a punto de cruzarse.»

➢ Ventajas: enriquece la trama y permite explorar distintos puntos de vista.
➢ Desventajas: Puede ser complicado mantener el equilibrio entre las
historias.

¿Cuándo usarla? Si tienes varias líneas argumentales que son igualmente importantes y querés que se entrelacen en algún punto, esta estructura puede ser muy efectiva.

Estructura del héroe

Esta estructura se centraliza en el viaje y evolución de un protagonista que enfrenta desafíos y sufre una transformación. Es una estructura común en novelas de aventura o fantasía, pero puede ser aplicada a casi cualquier género.

Ejemplo breve e ilustrativo:

«Lucas siempre fue un joven tímido. Cuando el mago lo eligió para emprender la misión, no se sentía listo. Sin embargo, tras enfrentar grandes peligros, regresó a su pueblo con la confianza de un verdadero héroe.»

➢ Ventajas: Fácil de seguir, la evolución del personaje es muy clara.
➢ Desventajas: Puede parecer predecible si no se innova en los detalles o no se le da giros a la trama.

¿Cuándo usarla? Si tu historia se enfoca en el crecimiento personal de un personaje o en
la superación de obstáculos, esta es una estructura ideal.

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Elegir la estructura narrativa correcta es clave para darle coherencia y ritmo a tu historia. Cada una de las estructuras presentadas tiene características únicas que pueden transformar tu obra, desde la claridad y simplicidad de una estructura lineal, hasta la profundidad emocional que puedes lograr con una trama fragmentada o circular. Al considerar el tipo de historia que quieres contar, tus personajes y el mensaje que deseas transmitir, estarás mejor equipado para seleccionar la estructura que impulse tu narrativa y mantenga a los lectores enganchados hasta el final.

No subestimes el poder de la estructura: puede marcar la diferencia entre una historia interesante y una verdaderamente inolvidable. Al tomar una decisión consciente sobre cómo organizar los eventos y el desarrollo de los personajes, estarás creando una obra con mayor impacto emocional, capaz de resonar con el público mucho después de que haya terminado.