Réquiem Octaviano es una obra basada en poesías inéditas de la autora, a partir de una musa inspiradora como lo es el amor. Un estadio de su vida que la encuentra plena, íntegra, completa y se evidencia en un yo lírico casi omnipresente, desafiante y arriesgado. Una muestra más de haber derribado sus propias barreras, de haberse superado, de escribir con libertad y satisfacción. Estas poesías muestran su estado de transparencia y de cómo el tejido de su personalidad se estiró para escuchar a la inspiración.
En palabras de Borges “Un libro es un conjunto de símbolos muertos, y entonces llega el lector adecuado, y las palabras –o mejor, la poesía que ocultan las palabras solas son meros símbolos– surgen a la vida, y asistimos a una resurrección del mundo”.
Hay un halo de resurrección en esta obra, de vuelta a la vida, de descanso complaciente, la mejor de las plegarias.