Un hombre enajenado y precario, se desahoga con una serie de redacciones sobre aquellas realidades que subyacen a toda la actividad convencionalmente establecida, que para los normales y corrientes pasa totalmente desaperciba.

Esta segunda conciencia despierta involuntariamente en algunas personas, haciéndolas aptas para captar esas inexplicables rudamentaciones que acaecen a toda la existencia humana. Tales escritos están llenos de abundantes reflexiones filosóficas sobre la libertad, la inteligencia, la pasión, el amor y la inevitable muerte. Esto se da con la pretensión de dar cuenta de esa realidad vacía y trágica que padecen todos los sujetos conscientes.

Por otra parte, un médico de honor y prestigio comienza a ser consciente de problemáticas irresolutas por su medicina. La incertidumbre lo lleva a incurrir en diferentes especulaciones infértiles que solo intensifican su malestar. A tal punto, que su desazón lo hará cometer un acto terrible del que luego se arrepentirá.