El mundo infantil transcurre entre la realidad y la imaginación, el gusto por los seres mágicos y la interacción con objetos y animales personificados. Sin embargo, muchos de nosotros conservamos ese gusto por las historias infantiles, la fascinación por los mundos ideales y alternativos donde todo es posible.

Leonardo Reale no es la excepción, habituado a narrarnos tramas en mundos imaginarios a través de sus puestas teatrales, incursiona en la escritura.

En esta oportunidad, de la mano de La Odisea de los Animales, nos transmite su cosmovisión sobre el mundo y la necesidad de valorar la sensibilidad para abordar las problemáticas de todas las especies y seres vivos que habitamos el Planeta Tierra.