Argentina, 1909. Como tantos otros inmigrantes, Francisca Laserre y su madre viajan desde Italia a nuestro país considerado como “la tierra de las oportunidades”, buscando una mejor calidad de vida. Su camino comienza en Buenos Aires, pero al poner los pies en un incipiente y colorido pueblo de Córdoba, Francisca se cruzará con Julién Hernandez Fovié, un inmigrante francés de alcurnia. Se trazará así el destino de los dos de forma determinante.
Sin embargo, no se tratará solo de su historia de amor. El paso del tiempo los redefinirá a ambos: sus sueños, deseos, pero también las obligaciones, debiendo vencer distintos obstáculos para alcanzar lo que tanto anhelan. Y decidir: dejar de lado el miedo y las ausencias para poder amar, de forma valiente y desmedida, ya sea en esta tierra o del otro lado del continente.