Este cuento trata sobre la amistad entre una flor y una mariposa. Pretende llevar a la reflexión sobre temas de espiritualidad. Con un tinte de autoayuda, habla de la importancia sustancial del pensamiento y las emociones y su influencia en el destino de los hombres. Valga la paradoja por tratarse de una flor y una mariposa interactuando con seres humanos. Con un final abierto, apuesta a la continuidad de la vida en el más allá.